Un reseña de Enrique Mezquita en Diario Médico informa de que un Juzgado de lo Penal de Valencia ha impuesto esa pena a un varón que irrumpió en el despacho de una médico embarazada desoyendo la prohibición del personal sanitario y que tras no obtener en el momento un informe como exigía exhibió una navaja para obligar a la facultativo a cumplir con su demanda. La sentencia entiende que en este caso hubo un delito de atentado contra funcionario sanitario y no meramente una amenaza.